sábado, 28 de mayo de 2011

Carta de Angustias (Ignacio Casarino)

Estimada Poncia:
Luego de la muerte de Adela, mis hermanas y yo tuvimos que continuar con el luto del padre de mis hermanas y con nuestra vida.
Atravesamos un período de tristeza por la muerte de Adela, pero especialmente yo, que descubrí que Pepe el Romano no me quería sino por mi dinero. Pero al igual que mis hermanas queríamos casarnos para salir de esta casa y escapar del luto.
En mi caso la única salida que tenía era casarme con Pepe el Romano, pero ya que él había cometido el crimen de haber estado por casarse conmigo y tener relaciones con Adela. Bernarda no me lo permitió.
Con la muerte de Adela, Bernarda se hizo más estricta, nos obligo a hacer lo que ella mandaba, pero si no lo haciamos nos trataba como traidoras. Magdalena cada vez llora más, supongo que es por la presión de estar encerrada en la casa. A medida que los días pasan, Martirio se parece más a Bernarda ya que dicta más órdenes. María Josefa murió días después de que Adela se suicidara y, por último, mis otras hermanas y especialmente yo cada día estamos más solas.

Atentamente
Angustias